Infierno Juguetón en Bernartice
En el espacio de la antigua capilla de Hus, los niños se encontrarán con demonios y otras criaturas de cuento.
Accesibilidad
Abierto todo el año, según el horario actual.
Admisión
Sí, según la lista de precios vigente.
¿Cómo se llega allí?
Aparcamiento disponible junto a la biblioteca municipal.
Información adicional
El Infierno Juguetón se creó como una galería ubicada en la ruta Písek–Tábor, en la localidad de Bernartice. Esta villa del sur de Bohemia se sitúa en un cruce entre las ciudades de Písek, Tábor, Týn nad Vltavou, Milevsko y Bechyně. En Bernartice encontrarás restaurantes, un bar de aperitivos e incluso helado. Se puede llegar al Infierno Juguetón en coche, en bicicleta o a pie desde cualquiera de estas ciudades. La galería está ubicada en el edificio de la capilla Hus, lo que la convierte en un lugar único no solo en la República Checa, sino también en todo el mundo. La capilla fue construida en 1926 y se conserva en su estado original – solo se ha reparado el techo. En su interior se instaló una exposición infernal que más tarde se amplió con los cuentos de hadas más famosos. El infierno está abierto todo el año. Ya sabes cuándo y a dónde.
Dentro te espera una recepción infernal con una cárcel para padres traviesos, donde los niños pueden "aparcar" a sus padres y disfrutar ellos solos del recorrido. En la recepción también se encuentra una exposición museística dedicada al arte del torneado de boquillas de pipa, que tuvo su origen precisamente en Bernartice. Las boquillas y piezas se exportaban a todo el mundo. Desde la recepción se accede a pasillos infernales llenos de misterio – cuesta creer que no estés realmente en una cueva. Padres e hijos recorren juntos el infierno, diseñado para que los niños puedan jugar. Pueden probar la balanza del pecado, el libro de los pecados, una máquina de tormentas y muchas cosas más. Los demonios son de naturaleza puramente checa – aquí no encontrarás figuras tipo krampus. Los personajes están inspirados en los cuentos de hadas más conocidos. Aunque con los diablos no se juega, los niños se lo pasarán en grande. La exposición incluye una réplica de la Biblia del Diablo y el único cráneo de diablo encontrado en el mundo.
Después del subidón de adrenalina en el infierno, los niños y padres suben al piso superior, donde en el campanario se encuentra el Observatorio de Satanás. Allí puedes mirar por un telescopio infernal. Desde el campanario se accede a un mundo de cuentos, donde en un entorno encantador los visitantes descubrirán nueve cuentos clásicos y una historia de terror. Drácula de Nosferatu duerme tranquilamente en una tumba abierta, Baba Yaga vuela en su pala, y el lobo que se comió a la abuela espera en la cama. Una roca artificial con una cueva alberga a un dragón de tres cabezas. Un gigante de seis metros vigila todo el lugar. En el mundo acuático, un espíritu de las aguas cuida del pez dorado. En las ruinas del castillo, un bandido guarda su tesoro en un cofre. Todos los personajes, tanto del infierno como del mundo de los cuentos, están a tamaño real y sus rostros transmiten una expresión muy humana. Incluso los adultos se sorprenderán.
Si decides visitar el Infierno Juguetón de Bernartice – ya sea a pie, en bici o en otro medio – vivirás una experiencia llena de adrenalina y diversión. Si no sabes qué hacer en el sur de Bohemia, escapa del aburrimiento y adéntrate en el infierno y los cuentos. Pedimos disculpas a los visitantes con discapacidad, ya que el infierno no es accesible. Para turistas y viajeros, tenemos sellos turísticos y pegatinas originales que con gusto colocaremos en vuestros libros, álbumes o cuadernos de viaje.